sábado, 14 de junio de 2008

domingo, 27 de abril de 2008

Mi angustia

Cronos aumenta la velocidad de sus pasos
en su búsqueda incansable por devorar mi existencia.
Mis pies no hacen más que apurar, asiduamente
el próximo centímetro del camino.
Ya mis piernas se cansan, se ven exhaustas ante este incesante acoso

El horizonte aparece allí en frente,
ya no creo alcanzarlo.
He perdido esa esperanza absurda
que me obligaba a ver un paraíso eterno.

La presión sobre mi estomago vacío ya es insoportable,
viendo a los míos caer a mi lado
quedando allá atrás, en la garganta de cronos,
paralizados de insignificancia para algunos que siguen corriendo.
Sin embargo mi tentación suele ser mirar hacia atrás
en un intento siempre in fortuito
de rescatarte de esa maldita garganta.

sábado, 26 de abril de 2008

Las sombras de la nostalgia

El pasado, el presente
Camino hacia algún lugar, quien sabe cual.
Sin sentido avanzo con la Mirada dispersa
Construyendo nuevos pasos sobre el camino incierto.

Atrás los grandes faros, que resplandecen como una gran explosión,
dejan en mi porvenir, poco entusiasmado,
un paisaje de sombras
que no sucumben ante la debilidad de los nuevos y esforzados reflejos
de alguna luz solidaria que no me pertenece.

Extraño aquel brillo incandescente,
Aunque no me dejaba ver mucho más,
Extraño no tener que ver mucho más.

El futuro (el deseo)
Sigo este camino sin sentido aprobado.
Ya mis pasos no razonan, siquiera,
la causa que los impulso a moverse a tan inesperada velocidad.
La inercia se hace irreversible, Casi incomprensible.
Pero aquellas sombras son más pequeñas,
Me dejan ver en el horizonte lejano
Una sencilla pero resistente luz
Que insiste frente a mis ojos
Borrando cautelosamente la oscuridad abrumadora
que aquel impetuoso faro proyectaba en mi sombra.

martes, 1 de abril de 2008

ALGUNA VEZ TE PREGUNTASTE: PARA QUE?



Solo me queda la duda en este viaje, sin sentido aun y con pasaje de ida solamente, que empezó un día, y quien sabe cuando, quien sabe porque, pero sigue su curso como un manantial que en sus primeras gotas comienza a descender por la ladera de la montaña con destino incierto.
Solo son verdades los cuestionamientos. Culpo a la pregunta, a es esa pregunta, la que pocos se animan a plantear, la que agota en un principio mi claridad absoluta, mi plenitud parcial de sabiduría, mi seguridad lógica que establece explicaciones a todo lo que tengo cerca. Es esa pregunta que cuando se aproxima a mi imaginación me da nota de que se hará presente cada vez mas, que nunca me dejara mi luz absoluta totalmente encendida, que moverá ese trampolín sobre el que estoy parado, creyendo que es tan firme como el escudo de un guerrero o una simple tela de araña y me mostrara que tan débil es el lugar donde estoy parado, no todo termina allí, pero no me mostrara donde si lo hará, solo dará lugar a seguir con el interminable cuestionamiento.
Me resigno ante tanto poder controversial que no supero con explicarlo todo, pero me tranquiliza aceptarlo infinito.